The Cookie Fairy (![[personal profile]](https://www.dreamwidth.org/img/silk/identity/user.png)
alcesverdes) wrote2005-10-20 09:26 pm
alcesverdes) wrote2005-10-20 09:26 pm
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Pertenencia mutua
Título: Pertenencia mutua
Fandom: Hellsing
Advertencias: AlucardxIntegra
Palabras: 593
Personajes: Alucard en primera persona, menciones a Integra y a sus antepasados.
Resumen: Por qué Alucard es tan devoto a Hellsing y a Integra.
Rating: PG-13
Notas de Autor: Regalo para Noemí por haber pasado la primera prueba ;D
Tan pronto como la vi, lo supe: ella debía ser mi ama, yo debía ser su esclavo. Su padre eligió bien; entendió que una vez posados mis ojos en ella, no obedecería a nadie más.
La expresión de Walter cuando me vio junto a ella, su boca torcida en comprensión, me hizo pensar que podría llegar a apreciarlo. Él le explicó todo sobre mí, todo menos quizá lo que yo hubiera querido que le explicara. Pero sí, ella era demasiado joven para comprender.
Integra Hellsing... tan pequeña, tan frágil, tan asustada y confundida. Se ha transformado de un cachorrito nervioso a una loba feroz, cuya sola mirada doblega a todos los hombres, porque todos los hombres son inferiores a ella. Me complace pensar que en parte es debido a mi influencia, a mi tutela.
Integra dobla su rodilla sólo ante la Reina de Inglaterra, la cabeza de la Iglesia Anglicana de la que es tan devota. Por extensión, también yo doblo la mía.
Si Integra quisiera, yo podría conquistar el mundo para ponerlo a sus pies. Claro que se escandalizaría si se lo propusiera, como lo hizo Mina, pero Integra aún es joven. Y aún es libre.
Mina, Mina Harker, mi adorada Mina. Por ti lo perdí todo. Fuiste mi único error, mi único delirio. Por ti me sometí. A tu descendiente que se te parece tanto me someto ahora. Se te parece tanto y sin embargo es tan diferente. Esa diferencia me deleita.
Abraham Van Helsing y sus seguidores no tenían oportunidad contra mí, pero contradiciendo toda lógica y todo espíritu inglés, te llevaron con ellos, Mina, y te utilizaron como escudo, como talismán, a sabiendas. Tú me hiciste transparente y predecible, Mina, tú lograste hacer que me rebajara al nivel de un humano. No quise forzarte, quise que vinieras a mí por tu propia voluntad. Cuando te vi entre ellos supe que debí haberme adelantado y llevarte a mi castillo cuando pude. Pero, ah, querida Mina, error tras error en tu nombre. Estúpido, como un humano, no pude soportar la idea de escucharte maldecir mi nombre durante la eternidad, primero por transplantarte con violencia de los brazos de Jonathan a los míos, luego por asesinar a todos tus amigos.
Jonathan, Jonathan... cómo lo odié, cómo odio su memoria, tanto como añoro la tuya, Mina. Mina Harker, luego Mina Hellsing cuando tu marido adoptó ese nombre al fundar el Instituto para combatir a los no-muertos con los conocimientos heredados de Van Helsing. Jonathan sabía que yo lo odiaba, por eso eras siempre tú, querida Mina, quien me enviaba a salvarle el pellejo. Con excepción de una sola cosa, nada me habría hecho más feliz que contemplar su carne desgarrada, sangrante, mancillada, pero siempre intervine para que tu precioso marido regresara al hogar que ambos compartían.
Durante un tiempo, cada cráneo de ghoul que destrozaba, cada corazón de vampiro que aplastaba era su cráneo y era su corazón. Jonathan tuvo suerte de morir antes que tú, Mina. Yo no habría tocado a tus hijos, pero a él lo hubiera descuartizado lentamente y luego empalado a la mitad de su patio frente a todos sus hombres.
Fuiste inteligente en ordenarme (aunque en tu voz había más súplica) que me convirtiera en el sirviente de tus hijos, y de los hijos de ellos, hasta llegar a Integra, quien se parece tanto a ti y a la vez es incomparable.
Con ella el ciclo vuelve a empezar, pero esta vez no hay un Jonathan que la aleje de mí. Y me encargaré de que así sigan las cosas.
Fandom: Hellsing
Advertencias: AlucardxIntegra
Palabras: 593
Personajes: Alucard en primera persona, menciones a Integra y a sus antepasados.
Resumen: Por qué Alucard es tan devoto a Hellsing y a Integra.
Rating: PG-13
Notas de Autor: Regalo para Noemí por haber pasado la primera prueba ;D
Tan pronto como la vi, lo supe: ella debía ser mi ama, yo debía ser su esclavo. Su padre eligió bien; entendió que una vez posados mis ojos en ella, no obedecería a nadie más.
La expresión de Walter cuando me vio junto a ella, su boca torcida en comprensión, me hizo pensar que podría llegar a apreciarlo. Él le explicó todo sobre mí, todo menos quizá lo que yo hubiera querido que le explicara. Pero sí, ella era demasiado joven para comprender.
Integra Hellsing... tan pequeña, tan frágil, tan asustada y confundida. Se ha transformado de un cachorrito nervioso a una loba feroz, cuya sola mirada doblega a todos los hombres, porque todos los hombres son inferiores a ella. Me complace pensar que en parte es debido a mi influencia, a mi tutela.
Integra dobla su rodilla sólo ante la Reina de Inglaterra, la cabeza de la Iglesia Anglicana de la que es tan devota. Por extensión, también yo doblo la mía.
Si Integra quisiera, yo podría conquistar el mundo para ponerlo a sus pies. Claro que se escandalizaría si se lo propusiera, como lo hizo Mina, pero Integra aún es joven. Y aún es libre.
Mina, Mina Harker, mi adorada Mina. Por ti lo perdí todo. Fuiste mi único error, mi único delirio. Por ti me sometí. A tu descendiente que se te parece tanto me someto ahora. Se te parece tanto y sin embargo es tan diferente. Esa diferencia me deleita.
Abraham Van Helsing y sus seguidores no tenían oportunidad contra mí, pero contradiciendo toda lógica y todo espíritu inglés, te llevaron con ellos, Mina, y te utilizaron como escudo, como talismán, a sabiendas. Tú me hiciste transparente y predecible, Mina, tú lograste hacer que me rebajara al nivel de un humano. No quise forzarte, quise que vinieras a mí por tu propia voluntad. Cuando te vi entre ellos supe que debí haberme adelantado y llevarte a mi castillo cuando pude. Pero, ah, querida Mina, error tras error en tu nombre. Estúpido, como un humano, no pude soportar la idea de escucharte maldecir mi nombre durante la eternidad, primero por transplantarte con violencia de los brazos de Jonathan a los míos, luego por asesinar a todos tus amigos.
Jonathan, Jonathan... cómo lo odié, cómo odio su memoria, tanto como añoro la tuya, Mina. Mina Harker, luego Mina Hellsing cuando tu marido adoptó ese nombre al fundar el Instituto para combatir a los no-muertos con los conocimientos heredados de Van Helsing. Jonathan sabía que yo lo odiaba, por eso eras siempre tú, querida Mina, quien me enviaba a salvarle el pellejo. Con excepción de una sola cosa, nada me habría hecho más feliz que contemplar su carne desgarrada, sangrante, mancillada, pero siempre intervine para que tu precioso marido regresara al hogar que ambos compartían.
Durante un tiempo, cada cráneo de ghoul que destrozaba, cada corazón de vampiro que aplastaba era su cráneo y era su corazón. Jonathan tuvo suerte de morir antes que tú, Mina. Yo no habría tocado a tus hijos, pero a él lo hubiera descuartizado lentamente y luego empalado a la mitad de su patio frente a todos sus hombres.
Fuiste inteligente en ordenarme (aunque en tu voz había más súplica) que me convirtiera en el sirviente de tus hijos, y de los hijos de ellos, hasta llegar a Integra, quien se parece tanto a ti y a la vez es incomparable.
Con ella el ciclo vuelve a empezar, pero esta vez no hay un Jonathan que la aleje de mí. Y me encargaré de que así sigan las cosas.